El Premio Nobel de Literatura se presentó en la Feria del Libro de Buenos Aires.
Por segundo año consecutivo, el Premio Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa acudió a la 43ª Feria del Libro de Buenos Aires, en la que, junto al Premio Miguel de Cervantes Jorge Edwards, defendió la lectura tradicional frente a las nuevas tecnologías.
En un diálogo frente a unas 500 personas, el escritor peruano y el chileno definieron La influencia de la literatura en los valores humanos, tal y como se titulaba su coloquio en el porteño predio de La Rural, donde se ubica el evento que durará hasta el 15 de mayo.
"Todos quienes hemos sido deslumbrados por ciertos libros que han marcado profundamente nuestras vidas podemos decir que esas experiencias son insustituibles", subrayó el escritor peruano, quien además afirmó: "En la memoria, esas experiencias han seguido acompañándome y han enriquecido extraordinariamente mi experiencia".
Una mejor experiencia. "La buena literatura desarrolla en nosotros el espíritu crítico. Nada nos enseña tanto como la literatura que el mundo está mal hecho y que, por lo tanto, debe cambiar para acercarse a esa perfección que encontramos en los poemas, en las novelas, en los grandes dramas", aseveró el ganador del Premio Nobel de Literatura en 2010.
El autor de La tía Julia y el escribidor (1977) describió la lectura como "fundamental", y se refirió a "los libros en papel" como un formato que "exige una participación intelectual mayor del lector, que hace un esfuerzo a veces enorme para acceder a la riqueza de esas imágenes".
En este sentido, concretó que "la enorme revolución de la comunicación que trajeron las pantallas debiera estar equilibrada con una educación que no sólo cree espectadores, sino también lectores".
Vargas Llosa se cuestionó "qué va a ocurrir con la lectura en un mundo donde las pantallas llegan a todos los rincones, si seguirá existiendo la lectura de manera tradicional o será monopolio de las pantallas".
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