Hasta ahora los hinchas no entienden qué quiso hacer.
El defensa brasileño Danilo estuvo a punto de convertirse en el villano del Real Madrid este jueves ante Sevilla, al anotar un gol de cabeza en arco propio (minuto 10). Para su buena suerte, su equipo logró empatar 3-3 en el Sánchez Pizjuán y avanzar a los cuartos de final de la Copa del Rey.
A la vuelta del descanso, Marco Asensio igualó el marcador tras un rápido contraataque (48). La alegría por la igualada duró poco en el equipo blanco, ya que poco después, el montenegrino Stevan Jovetic hacía el 2-1 al rematar un centro de Escudero (54) en su estreno como jugador sevillista e Iborra marcaba el 3-1 (77), aunque Sergio Ramos transformó un penal para hacer el 3-2 (83).
Cuando parecía que el partido se encaminaba hacia la derrota blanca, apareció Karim Benzema para hacer la igualada en el descanso (90+3).
El gol del delantero francés sirvió para que los blancos establezcan una nueva marca de 40 partidos consecutivos sin perder, uno más que el anterior récord del Barcelona (39 encuentros en 2015/2016). Con información de AFP
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