Informe de la ONG Enviromental Integrity Project revela que el agua subterránea de 19 zonas, cercanas a plantas eléctricas de carbón, contienen este metal.
El agua subterránea de diecinueve zonas de EE.UU., cercanas a plantas eléctricas de carbón, contiene arsénico debido a la contaminación que estas industrias provocan en el suelo, informó la ONG Enviromental Integrity Project (EIP).
EIP identificó un total de 20 sitios adicionales de vertido de cenizas de carbón que contaminan las aguas subterráneas y el suelo en diez estados; Florida, Georgia, Illinois, Indiana, Iowa, Kentucky, Nevada, Carolina del Sur, Tennessee y Texas.
El informe llevado a cabo por la ONG advierte de que las cenizas de carbón han contaminado el agua subterránea con arsénico y otros contaminantes a niveles superiores del máximo permitido.
De hecho, en algunos casos, los niveles de contaminación por arsénico superan en más de 10 veces los niveles permitidos por las autoridades de EE.UU., informó EIP.
Estos registros de contaminación acuífera ponen en peligro la salud de las personas que viven cerca de las bolsas de agua en cuestión, y los contaminantes de las cenizas generadas por la operación de las centrales eléctricas que funcionan con carbón son las causantes del desastre.
La organización en defensa del ambiente insiste en que, además de trabajar en la reducción de la contaminación del aire, se deben elevar los esfuerzos en preservar las aguas subterráneas, porque la supervisión del subsuelo ante posibles contaminaciones es mucho menor.
Según el informe de EIP, además del arsénico, encontraron restos de plomo, bario y otros productos químicos tóxicos en las aguas sometidas a estudio.
EFE
Comparte esta noticia