Si el próximo 31 de octubre ningún candidato logra el apoyo del Congreso para formar Gobierno, habrá nueva elección, la tercera en un año. Rajoy es la opción más probable.
El rey Felipe VI de España se reunirá con líderes políticos del país los días 24 y 25 de octubre para saber si hay posibilidades de proponer un candidato como jefe del Ejecutivo con posibilidades de obtener la investidura en un debate en el Congreso. Si de la ronda del rey sale un candidato, el debate en el Congreso tendría lugar en cuatro fechas comprendidas entre el 26 y el 31 de octubre.
Hay que precisar que este 31 de octubre vence el plazo legal para que haya nuevo Gobierno y, en caso contrario, los españoles volverán a las urnas dentro de dos meses, la tercera vez en un año.
España no tiene Gobierno. España carece de Ejecutivo con competencias plenas desde los comicios legislativos de diciembre de 2015 y los que tuvieron lugar en junio pasado tampoco modificaron la situación, porque el socialista Pedro Sánchez, en marzo, y el actual presidente en funciones, Mariano Rajoy, en septiembre, fracasaron en su intento de conseguir el apoyo del Congreso.
Rajoy es el más probable. La única opción sobre la mesa es la de Rajoy (PP, centroderecha), pero para lograr la investidura necesita el apoyo del PSOE (socialistas), que tiene 85 diputados y que estos días debate si cambia el sentido de su voto, que fue negativo en el primer intento de Rajoy. Los socialistas discuten si deben abstenerse en una segunda votación. Aunque Rajoy solo necesita necesita la mayoría simple (más síes que noes) para formar Gobierno.
Abstención del PSOE beneficiaría a Rajoy. Una comisión gestora interina lleva a cabo estos días contactos con dirigentes del partido para saber si los socialistas pueden favorecer la elección de Rajoy mediante una abstención. Un gesto en ese sentido de los socialistas hace previsible que Felipe VI vuelva a proponer al líder del PP, que accedió a la Jefatura del Gobierno español a finales de 2011.
¿Qué necesita Rajoy para ganar? Hace unas semanas Rajoy logró el respaldo de los 137 curules de su partido, más 32 de los liberales de Ciudadanos y uno de una diputada regional canaria. Le harían falta seis votos más a favor, hipótesis poco probable, o que en una segunda votación hubiera once abstenciones de los que hasta ahora le han rechazado, de modo que ganaría por mayoría simple.
Comparte esta noticia