El fiscal general de Estados Unidos, Jeff Sessions, anunció la aplicación de la medida para las ciudades que no colaboren con la deportación de indocumentados.
El Gobierno del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, amenazó con recortar fondos a las ciudades que se nieguen a colaborar con la deportación de personas indocumentadas e inmigrantes con récord delictivo.
Este lunes, el fiscal general, Jeff Sessions, dio un ultimátum a las casi 200 entidades locales conocidas como 'ciudades santuario'. Entre ellas se encuentran grandes urbes dirigidas por la oposición demócrata como Los Ángeles, Chicago y Nueva York.
Fuerte anuncio. "El presidente ya dijo que esta desobediencia a la ley debe terminar. Cuando las ciudades y los estados se niegan a ayudarnos y a hacer cumplir nuestras leyes, nuestro país es menos seguro. No deportar a los inmigrantes que han sido condenados por crímenes pone a todas nuestras comunidades en riesgo", afirmó el funcionario en una rueda de prensa en la Casa Blanca.
Así, Sessions anunció que se dejará de otorgar subvenciones a las ciudades y condados que permitan la puesta en libertad de y omisión de información sobre estas personas. "El Departamento de Justicia tomará todos los pasos necesarios para recuperar cualquier fondo que se haya dado a una jurisdicción que deliberadamente incumpla la ley".
¿Subvenciones? Las subvenciones del Departamento de Justicia corresponden a fondos para el entrenamiento de la policía local y partidas económicas para la adquisición de nuevos equipos. En el año fiscal actual (del 1 de octubre de 2016 al 30 de septiembre de 2017), el presupuesto destinado a subvenciones asciende a 4.100 millones de dólares.
"Asaltos, robos, delitos de drogas, crímenes de pandillas, violaciones, crímenes contra niños y asesinatos. Innumerables estadounidenses seguirían vivos hoy en día si las políticas de estas 'ciudades santuario' hubieran sido suprimidas", consideró Sessions en su intervención. En respuesta, el fiscal general del estado de Nueva York, el demócrata Eric Schneiderman, aseguró que dará "las herramientas necesarias para proteger a las comunidades de inmigrantes". Además, Schneiderman dijo que Trump "carece de autoridad constitucional" para establecer esta medida.
Promesa de Trump. En campaña, Trump amenazó con "desmantelar" las 'ciudades santuario'. Luego de pocos días de asumir el cargo presidencial, firmó una orden ejecutiva para interrumpir la concesión de fondos a las entidades locales que se nieguen a cooperar con las autoridades federales.
Los líderes de estas localidades, como el alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, han rechazado las exigencias de Trump y han asegurado que seguirán protegiendo a los inmigrantes de la deportación. En cambio, otros dirigentes republicanos como el gobernador de Texas, Greg Abbott, mostraron su apoyo a la ofensiva. (EFE)
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