¿De qué se le acusa exactamente al vicepresidente de Ecuador y cuál es su defensa?

El vicepresidente de Ecuador, Jorge Glas, para quien se dictó este lunes orden de prisión preventiva, es investigado penalmente por la trama de millonarios sobornos de la constructora Odebrecht.

La Fiscalía cerró el domingo la etapa de instrucción del caso de corrupción propiciado por la multinacional brasileña, por el que en el país sudamericano están siendo procesados 18 personas, incluido Ricardo Rivera, tío de Glas, y un excontralor, sin que haya condenas.

Las acusaciones. Glas, a quien el presidente Lenín Moreno despojó de sus funciones en medio de una ácida disputa de poderes que ha dejado al oficialismo al borde de una ruptura, es acusado por Jose Conceicao Santos Filho, un delator de Odebrecht, de haber recibido sobornos por 16 millones de dólares de la constructora a través de Rivera a cambio de otorgamiento de obras públicas.

Santos ha explicado que Odebrecht habría pagado, en pleno Gobierno de Rafael Correa (2007-2017), US$ 2 millones para facilitar el regreso de la multinacional a Ecuador entre el 2010 y 2011 y US$ 14 millones correspondientes al 1 % de todos los contratos que tuvo la empresa en el país tras su retorno.

Su defensa. Según El Telégrafo, el delator reveló también que él hacía los pagos en varios sitios, particularmente a Ricardo Rivera, para quien también se ordenó prisión preventiva. "Jorge Glas y Ricardo Rivera son hermanos siameses, se alimentan y respiran por el mismo cuerpo. No hay diferencia entre ellos", dijo Santos el pasado 27 de septiembre desde el Consulado de Ecuador en Brasil, en referencia a que ambos mantenían contacto permanente.

El vicepresidente de Ecuador, que acata "bajo protesta" la orden de prisión en su contra, niega las acusaciones indicando que Odebrecht tiene "más de mil millones de razones para odiarme". "El primer motivo es que cancelamos todos sus contratos en Ecuador provocando que perdiesen más de 700 millones de dólares. Fui yo mismo quien recomendó la expulsión de Odebrecht del país"

"Todo lo que Santos expresó se tiene que probar. Sé que ha estado destilando odio y no entiendo cómo los jueces permiten que haga ese tipo de expresiones, que, además de estar fuera de lugar, tienen que ser probadas dentro de un proceso", comentó Jorge Glas en una entrevista con Radio Morena.