Pobladores viven en medio de la desgracia y afirman sentirse abandonados por sus autoridades tras huaicos en el sector Río Seco.
Sin agua potable, energía eléctrica ni desagüe viven más de 150 familias que resultaron afectadas y damnificadas por los siete huaicos en el sector Río Seco, en el distrito trujillano de El Porvenir, tras los desbordes de la quebrada San Idelfonso.
“Hay zancudos, hay hongos en los pies y necesitamos botas”, expresaron los pobladores que señalaron sentirse abandonados. “No tenemos refugio”, agregó una moradora. Las calles lucen con basura y los desagües colapsaron, por lo que hay riesgo de que contraigan enfermedades.
Los vecinos afirman sentirse abandonados por sus autoridades porque no reciben ayuda humanitaria. Con palas y baldes, huaicos sacan el barro y lodo de sus viviendas, algunas de las cuales se derrumbaron y otras estarían por desplomarse. Ellos se reunirán para dirigirse a sus autoridades y exigirles atención urgente.
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