Jairo es un colombiano-estadounidense quien se dedica al cuidado y preservación de animales en riesgo en la selva.
La región Loreto pero sobre todo Iquitos, nos depara innumerables historias de personas que no necesariamente nacieron en esta tierra, ni en el Perú, pero que llegaron, se enamoraron y sobre todo impulsaron proyectos más que interesantes.
Uno de estos casos se presenta en Iquitos, y es el de John Jairo Garnica Rodríguez, un colombiano nacionalizado estadounidense que llegó hace diez años a la ciudad y lleva adelante el proyecto de rescate de animales en peligro de extinción.
Dicha actividad la realiza desde el Centro de Rescate y Rehabilitación de Fauna Silvestre o Rainforest Awareness Rescue Education Center – RAREC, siglas en inglés, el cual encabeza y que se inició de una manera que ni el mismo puede creerlo.
Jairo volvió a nacer tras un fatal accidente de tránsito que lo dejó varias semanas en estado de coma, y debido al poco dinero que le quedó debido a varias operaciones para recuperar su salud, emprendió una lucha por preservar y educar en favor de la fauna amazónica, esto tras dejar de lado su empresa de exportación de peces.
El centro RAREC
En el kilómetro 47 de la carretera Iquitos – Nauta a una hora aproximadamente del centro de la ciudad se encuentran los ambientes de RAREC. En este centro de rescate, los profesionales trabajan en algo que consideran importante: la educación ambiental.
Los ambientes de este fascinante Centro de Rescate y Rehabilitación de Fauna Silvestre, alberga un mariposario, maquisapas, frailes, entre otras especies de como el tapir amazónico. Entre ellas se puede apreciar a una traviesa tigrilla, Daenerys, quien fue separada de sus padres por personas inescrupulosas que creen que son mascotas domesticables.
Una de las especialistas considera que por la edad que fue separada de sus padres sin haber aprendido a desenvolverse ante los peligros en la selva, su reinserción a su habitad natural es casi imposible.
En este centro también trabajan con manatíes como Requena y Maynas que están siendo alimentados para recobrar su peso, y otros manatíes ya adultos que están próximos a ser liberados en comunidades cercanas a Iquitos, Jairo asegura que por el amor que tiene a los animales es que decidió trabajar por su rescate y conservación, así como el cuidado del mono choro.
Continuará con preservación
Este colombiano-norteamericano, considera que nuestro país está atrasado en cuanto a la conservación, pero tiene fe que “el Perú empezará a conservar la Amazonía”.
En RAREC uno puede pasar todo un día, participar del voluntariado, en educación ambiental y en proyectos como hidroponía, entre otros. Jairo está presto a recibir el apoyo de organizaciones y de personas que quieran sumarse al rescate de animales, pues si no se trabaja en su rescate serán animales a los que conoceremos solo en libros.
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