El abogado Roger Rodríguez Santander presentó su carta de renuncia al ministro Enrique Mendoza tras el indulto humanitario a Alberto Fujimori.
El director general de Derechos Humanos del Ministerio de Justicia, Roger Rodríguez Santander, presentó su carta de renuncia al ministro Enrique Mendoza el domingo 24 de diciembre. En la misiva, señala que uno de los motivos de su renuncia fue otorgar un indulto al expresidente Alberto Fujimori por el cual “no calificaba”.
“La sucesión de eventos que se han presentado en los últimos días determinan que los supuestos padecimientos que aquejan gravemente su salud y que han sido alegados para justificar la concesión carezcan de un mínimo grado de verosimilitud. Tales eventos son muestra más bien evidente de que a veces la búsqueda de mantener el poder convierte en borroso el sentido de lo éticamente debido y de lo jurídicamente posible. Me permito recordar que fui miembro de la Comisión de Gracias Presidenciales que recomendó no concederle el indulto en el año 2013. En aquella ocasión fui testigo de excepción de cómo también entonces, aunque sin éxito, se pretendió manipular la realidad”, escribió el funcionario del Ministerio de Justicia.
El indulto
Este domingo 24 de diciembre, a las 6 de la tarde de la víspera de Navidad, PPK otorgó el indulto humanitario a Alberto Fujimori. El exmandatario cumple prisión efectiva desde 2007 por diversos casos de corrupción, usurpación de funciones y por ser responsable mediato de las matanzas de Barrios Altos y La Cantuta, y por el secuestro del periodista Gustavo Gorriti y el empresario Samuel Dyer.
El Gobierno tomó esta decisión tras recibir la recomendación de una junta médica que señaló en su informe que Fujimori "padece de una enfermedad progresiva, degenerativa e incurable y que las condiciones carcelarias significan un grave riesgo a su vida, salud e integridad". Esta gracia presidencial llega apenas tres días después de una votación en el Congreso en la cual Fuerza Popular no alcanzó los votos necesarios para vacar a PPK. Diez congresistas de esa bancada, entre ellos Kenji Fujimori, se abstuvieron y salvaron al presidente.
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