La hija de Reyna Pachas conoció al mejor amigo de su novio y quedó impresionada con sus musculosos brazos.
Como dice la canción, todo empezó como jugando y así Shirley se fue entusiasmando con Mauricio, el mejor amigo de su novio Anthony. Ella fue encargada de adiestrar el musculoso joven respecto a sus obligaciones como terramozo.
Y como se quedaba a solas con Mauricio se da cuenta que el muchacho carga las maletas de los pasajeros sin el menor esfuerzo. “¿Vas al gimnasio? ¿Haces ejercicios?”, le pregunta. “A veces”, responde el despreocupado joven. Pero Shirley se le acerca y le toca los brazos y queda totalmente impresionada con sus abultados biceps.
Tanta es su impresión por el cuerpo de Mauricio que hasta le cuenta a su madre que ha encontrado a quien cree será el hombre de su vida. “Ay hija, a nosotras nos encantan los hombres con brazo de gorila”, comenta Reyna.
Anthony no entiende por qué en los últimos tiempos Shirley se aleja de él y ya no lo quiere ni besar. Lo que no sabe es que durante un traslado de equipajes Shirley y Mauricio terminan muy cerca uno del otro hasta que llegan a besarse. Y las citas a escondidas se repiten y los besos también mientras Anthony marca una y otra vez el celular de Shirley pero esta no le responde.
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