¿Cómo están, amigos?
Antes que nada, disculpen la prolongada ausencia en el blog. Soy periodista y la coyuntura del coronavirus me tuvo atareado, y también bastante preocupado, al ver lo que está ocurriendo en el mundo.
Sé que las medidas impuestas en Perú son drásticas (nunca hemos tenido aislamiento obligatorio, y particularmente era muy pequeño durante los toques de queda por el terrorismo). Pero creo que es lo más adecuado para frenar una enfermedad que tiene en vilo a naciones como España o Italia.
Lo más cercano a un confinamiento obligatorio que viví fue -en mi niñez- cuando me enfermé de sarampión (¿o era rubéola?, ya no recuerdo). Pasé varios días en casa, obligado a estar alejado de mis amigos para no contagiarlos. Y lo curioso es que, en aquella época -tal como ocurre ahora- no me faltaron videojuegos.
Durante esos días, mi querida Super Nintendo y mi televisor Emerson (¿aún existe esa marca?) fueron mis compañeros de juego. Acabé U.N. Squadron (con los tres personajes); saqué campeón a la ‘U’ en Super Descentralizado 95; y terminé Donkey Kong Country 3. Sin duda, fue una semana productiva.
Ahora trato de hacer lo mismo. Como ya les adelanté en las redes sociales de Más Consolas, estoy pasando Nioh 2 y, luego, tengo pensado jugar DOOM Eternal. Ya bajé la demo del remake de Resident Evil 3. Y, de tanto en tanto, me doy tiempo para unas partidas de Modern Warfare.
Es curioso que los videojuegos no solo son fuente de entretenimiento y relajo, sino que también me han servido para mantenerme en contacto con mis amigos. Anoche jugué varias horas Modern Warfare haciendo team con mis camaradas de toda la vida. Conversamos, bromeamos... y renegamos cuando las cosas no salían bien en el juego.
Pero no todo son videojuegos...
Aparte de mis horas de teletrabajo, estoy aprovechando el tiempo para retomar el vicio de la lectura y para ver películas y series (aprovecho para recomendarles Kingdom, en Netflix). También escucho música. He ordenado mi colección de álbumes de rock y heavy metal, y los pongo cada vez que hago la limpieza, lavo la ropa o mi hago mi aseo personal.
Otra actividad en la que estoy invirtiendo tiempo es en cocinar. No solía hacerlo muy seguido (casi a diario almorzaba en la calle), pero ahora es prácticamente una necesidad. No lo hago mal, pero si la cuarentena se prolonga debo aprender más recetas.
En fin. Solo quería contarles un poco de lo que estoy haciendo en estos días de aislamiento. Espero la próxima semana tener listo mi análisis de Nioh 2, para compartirlo con ustedes, y si tienen alguna recomendación de un tema para el post, los escucho.
No dejen de contarme qué están jugando ahora durante la cuarentena. Aprovechen el tiempo en terminar todos sus títulos pendientes, que -apuesto- son un montón.
¡Cuídense mucho!, y sigan acatando las indicaciones de las autoridades. De nosotros depende que la medida no se prolongue.
Un abrazo
Su amigo y vecino.
Comparte esta noticia
Siguenos en