¿Qué es la cultura turística y por qué es importante para el Perú?

Si hablamos de fortalecer nuestra identidad, fomentar el buen trato al turista (nacional y extranjero) y promover la protección del patrimonio, hablamos de cultura turística. Este conjunto de conocimientos, valores y actitudes, busca que todos reconozcamos al turismo como un mecanismo para lograr el desarrollo sostenible del país. Y de hecho, todos podemos apoyar fomentándola.

Un futuro positivo. Según Mincetur, la meta para 2021 es generar en la población local el reconocimiento de la importancia de la actividad turística para el desarrollo local y nacional, fomentando la participación conjunta del sector público y privado, con la finalidad de alcanzar el desarrollo sostenible del turismo y la dinamización del sector.

Un ejemplo actual de ese objetivo es Antioquía, un pequeño distrito de la provincia de Huarochirí (Lima) que supo rescatar lo mejor de sus tradiciones y convertirse en un destino imperdible. Todo comenzó en el 2004, cuando esta zona predominantemente agrícola tuvo problemas con la desforestación y degradación de sus suelos. La producción había caído. Muchas personas tomaron la decisión de migrar hacia Lima en busca de mejores oportunidades, pero las autoridades locales quisieron buscar una solución. Como Antioquía está a 32 kilómetros de Cieneguilla, zona con un gran flujo de turistas los fines de semana, el gobierno local planteó la posibilidad de atraerlos. Pero tenían que cambiar la imagen del pueblo.

Había que diferenciarse de los demás. Así fue que convocaron a diferentes artistas plásticos. Enrique Bustamante fue el elegido. Su propuesta fue pintar representaciones de flores y palomas en las fachadas de las casas. Quería darle vida al lugar y mostrar a los turistas que eran un pueblo netamente agrícola. Pero el plan no quedó ahí. Arreglaron el ingreso, la plaza de armas, empedraron las calles y mejoraron su sistema de agua y desagüe. Por último, habilitaron un centro de atención al turista, enseñándole a su gente la importancia de ser amable y respetuosa y fomentaron la creación de microempresas, especialmente en la elaboración de mermeladas.

Con su proyecto, el turismo en la zona ha aumentado considerablemente, ganaron notoriedad e incluso, hasta un récord Guiness: ser reconocidos como el retablo más grande del Perú por sus casitas pintadas. El siguiente reto es convencer a los turistas de quedarse más tiempo.