Magaly Medina, Laura Bozzo y Alejandro Toledo: Los 'Monstruos' que llegan a la FIL Lima 2018

Los monstruos son seres sorprendentes, fascinantes, casi irreales y que además de un buen susto, generan interés y atención. Algo así sucede con tres personajes extremos de la televisión peruana, a quienes Fernando Vivas dedica su último libro ─titulado "Mis monstruos favoritos"─ y que se presentará en la FIL Lima.

"Le propongo al lector que se entretenga y a la vez, piense en cómo esos monstruos reflejan nuestra propia monstruosidad ─que deberíamos tener dominada─, pero estos personajes se nos fueron de las manos", dijo Vivas a RPP Noticias.

Sobre su época como comentarista televisivo, Fernando Vivas analizó que la televisión ha perdido el impacto que tenía hace 10 años, y eso no ha mermado su interés en hablar de ella, aunque ahora está más enfocado en hacer periodismo político.

"La televisión ha bajado su impacto en la sociedad, por las redes sociales o por otros medios. La misma pantalla del televisor la usamos para ver otras cosas, sea para cable o Netflix. Pasó el momento en que la TV copaba tanto nuestras conversaciones diarias que había que estar comentándola", resaltó.

UN CRÍTICO Y UNA 'URRACA'

Durante la época que hizo crítica televisiva, Vivas recuerda que su relación con Bozzo y Medina fue bastante tensa, hasta el punto en que ambas siempre respondieron con ácidos comentarios a sus columnas. El caso del expresidente peruano es algo más particular. "hace unos años me dedico al periodismo político, y el político que más ha cuestionado mi percepción de la política es Alejandro Toledo", comentó.

Sobre Magaly Medina, Vivas reconoció que mantuvo una relación de amistad durante muchos años con ella, antes de que se hiciera famosa, incluso el apelativo de 'Urraca' se lo debe a él, pues así la bautizó antes de su salto a la TV.

"Magaly Medina es un capítulo muy personal, porque antes de ser su crítico, fuimos buenos amigos. Incluso antes de que ella entre a la televisión yo la llamé cariñosamente 'urraca', y ella se quedó con ese nombre. Ella quería ser una periodista literaria, escribir libros, no ser famosa para la masa sino para sus pares. Sin embargo se convirtió en un ídolo de masa de aquellos que, como crítica de televisión que fue, ella detestaba", afirmó.