Diego Rodríguez: Fue un asesinato a sangre fría dice su jefe

El diseñador argentino Daniel Casalnovo expresó en Buenos Aires su indignación por la muerte del modelo publicitario, a quién conocía desde hace 8 años. "Era un tipo que todo el mundo quería", dijo consternado.

Diego Rodríguez, de 27 años de edad, llegaba a la casa de su novia en Liniers cuando delincuentes intentaron robarle su camioneta y le dispararon en la cabeza, lo que provocó su muerte. El hecho conmocionó el mundo de la moda.

"Este muchacho era tan bueno, lindo, imagen de mi marca y no hacía otra cosa porque respetaba todo. No hacía otra marca de trajes que no fuera la mía", señaló Casalnovo. Y agregó: "Es un tipo que todo el mundo quería, yo estoy hace mucho en esto. Todos los modelos de la camada de él, esos son modelos que son del target de hombre. Los de ahora no saben desfilar, no son responsables".

Casalnovo contó que conocía a Rodríguez desde hacía 8 años y desde hace 6 que trabajaba como imagen de la marca del diseñador.

"En mis sucursales tengo las fotos de él y las voy a dejar toda la vida. Yo lo escribí en Facebook, 'Siempre vas a ser mi modelo'", señaló.

El diseñador también expresó que no tuvo oportunidad de hablar con los familiares del joven pero que iba a participar del velatorio que se realizará en las siguientes horas.

"Cuando me separé fue el único que me preguntó cómo estaba, era un amigo. Buena gente, él es muy querido. Tenía muchos emprendimientos nuevos. Un tipo tan lleno de proyectos ¿Y a él le van a robar? Yo tengo 50 años no me importa que me maten, ya cumplí con lo que quise hacer pero a este muchacho de 27 años, no", expresó Casalnovo al tiempo que pidió disculpas por los términos y el enojo con el que hablaba.

"Hoy para mí no es un día. Yo estoy todos los días impecable y hoy no me importa nada", dijo y agregó: "Recién alguien me preguntaba qué le diría a los delincuentes. ¿Qué les voy a decir? Nada, ya está hecho, a Diego no lo voy a recuperar más. Estoy indignado y con una impotencia que no sé".

El diseñador además contó que tiene su local al lado de la embajada de España, en el barrio porteño de Recoleta, y le entraron a robar tres veces.

"Lo único que tengo yo de bueno es que no le tengo miedo a la muerte pero Diego estaba en su mejor momento, no puede ser, no era el momento de él".

Por último, Casalnovo aseguró que del modo que conocía al joven, no cree que se hubiera negado entregar su camioneta a los delincuentes. "Lo de Diego fue un asesinato a sangre fría", concluyó.

En tanto, Diego era también la cara de la marca Dufour. Silvia Valle, agente de prensa de la firma, se refirió con dolor al repentino fallecimiento.

"Hace siete años que trabajaba para nosotros. Bonachón y de perfil muy bajo, era un excelente profesional", señaló.

"Era muy puntual y siempre bien predispuesto. Lo queríamos muchísimo no sólo por su profesionalismo sino también porque era un ser humano excepcional", añadió en declaraciones que consigna el portal infobae.com.