Barcelona vs. Juventus: Buffon-Ter Stegen, una batalla generacional bajo los palos

Cuando el 22 de abril de 2003 Gianluigi Buffon completó una destacada actuación en el Camp Nou que ayudó al Juventus de Turín a firmar el pase a las semifinales de la Liga de Campeones, a Marc-André Ter Stegen le faltaban ocho días para cumplir los once años.

Poco podía imaginar entonces el alemán que, doce años después, se vería las caras con el guardameta italiano en una final europea defendiendo la portería del FC Barcelona.

Se trata de uno de los duelos personales más antagónicos del encuentro que turineses y catalanes disputarán el próximo sábado en Berlín. Los 37 años de experiencia del meta transalpino contra las descaradas 23 primaveras del teutón. La emotividad mediterránea de Buffon ante la frialdad germánica de Ter-Stegen, uno de los estandartes de la nueva generación de porteros que ha cultivado el fútbol alemán. Los reflejos del 'bianconero' contra el juego de pies del azulgrana.

Suplente en la Liga, Ter Stegen está a un partido de igualar la trayectoria del guardameta del Real Madrid Iker Casillas, que el año pasado levantó los dos trofeos -Copa del Rey y Liga de Campeones- en los que jugó de titular.

En su primera participación en la máxima competición europea, no le ha podido la presión de sustituir a otra leyenda, Víctor Valdés, como tampoco parece haberle afectado el hecho de tener que ponerse los guantes cada quince días.

En los doce partidos que ha disputado ha recibido diez goles, atajando 26 balones y completando notables actuaciones como en la vuelta de los octavos de final ante el Manchester City, así como en el segundo encuentro de semifinales contra el Bayern Munich.

Estadísticamente, los registros de Buffon en los doce partidos de la Liga de Campeones que ha disputado este curso son ligeramente superiores a los del exguardameta del Borussia Monchengladbach.

A sus 37 años, ha recibido siete tantos (0,58 goles por partido), realizando un total de 21 acciones de mérito, entre las que sobresalieron las que realizó en la vuelta de los cuartos de final contra el Mónaco.

Uno tendrá la misión de evitar la opulencia ofensiva de Messi, Neymar y Suárez, el tridente más goleador de Europa, mientras que el azulgrana, además de vigilar la verticalidad de la pareja hispano-argentina que forman Morata y Tévez, deberá sacar a relucir su excelente juego de pies para iniciar la salida del balón de su equipo.