Plagado de figuras como Robben, Sneijder, Van Persie, Van der Vaart o Klaas Jan Huntelaar, el cuadro Tulipán se fue del torneo con cero puntos.
La fase de grupos de la Eurocopa dejó buenas sensaciones para muchos equipos y muy malas para otros, entre los que se encuentra Holanda, claramente la mayor decepción del torneo hasta el momento.
El equipo de Bert Van Marwijk ha pasado de ser subcampeón del mundo en Sudáfrica a ser apeado a las primeras de cambio en el máximo torneo europeo de selecciones. Holanda, junto a España y Alemania, partían como una de las grandes favoritas para ser campeonas, pero los "oranje" tiraron a la basura todas sus opciones en tres partidos.
Y eso que contaban con una nómina de jugadores impresionante. Muy pocas selecciones podían presumir de tener nombres como Arjen Robben, Wesley Sneijder, Robbie Van Persie, Rafael Van der Vaart o Klaas Jan Huntelaar. Estaban destinados a ser los sucesores de la Holanda que ganó la Eurocopa 1988, un título que levantaron hombres como Van Basten, Gullit o Rijkaard.
Ubicado en el "grupo de la muerte" junto a Alemania, Portugal y Dinamarca, no fue capaz de ganar ni un partido. En su estreno, perdió 0-1 contra los daneses. Después, sucumbió 1-2 contra el equipo de Joachim Löw y cerró su participación con otra derrota (2-1) frente a los portugueses. Cero puntos para una participación de suspenso.
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