La molestia de los pasajeros, que en su mayoría regresaban a sus hogares luego de su jornada laboral o de estudio, era notoria debido a la desinformación y la aglomeración de pasajeros en ambos lados de la vía.
Largas colas se volvieron a registrar la noche del lunes en los paraderos del Corredor Azul Tacna-Garcilaso-Arequipa, que comenzó a funcionar desde este 1 de setiembre de manera ininterrumpida.
La molestia de los pasajeros, que en su mayoría regresaban a sus hogares luego de su jornada laboral o de estudio, era notoria debido a la desinformación y la aglomeración de gente en ambos lados de la vía.
“Me he demorado casi 40 minutos, en la mañana, he llegado tarde a mi trabajo, normalmente llegaba en 20 minutos”, declaró, fastidiado, uno de los usuarios de este servicio.
Otros manifestaron que la frecuencia de dos minutos, con la que pasarían los buses, no se estaba cumpliendo. “Con el sol cincuenta que vamos a pagar no viajamos cómodos tampoco”, indicó otra usuaria, quien dijo que ya estaba esperando 20 minutos. “Nadie está en contra de la reforma, pero creo que de una mejor manera”, agregó.
Además, también se pudo constatar que las unidades pasaban totalmente llenas.
La misma situación se vivió durante el día, ya que los buses no se abastecían para la cantidad de gente que trataba de movilizarse en estas unidades.
-->(Bus del Corredor Azul se malogra en inicio de operaciones)
Debido a esta situación, el Ministerio de Trabajo estableció una tolerancia de dos horas para las personas pudieron llegar a sus centro de labores.
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