Las nuevas sanciones son más restrictivas que las adoptadas el pasado julio en los mercados de capital, defensa, productos de uso dual y tecnologías sensibles.
Las nuevas sanciones económicas de la Unión Europea (UE) contra Rusia por su implicación en la crisis de Ucrania entraron hoy en vigor, con su publicación en el Diario Oficial de la UE.
Las medidas, que por primera vez afectarán al sector petrolero, serán revisadas antes de finales de mes para decidir si es necesario anularlas o modificarlas en función de la evolución del alto el fuego y el plan de paz.
Las nuevas sanciones son más restrictivas que las adoptadas el pasado julio en los mercados de capital, defensa, productos de uso dual y tecnologías sensibles.
En particular, limitarán la financiación a tres empresas petroleras: Rosneft, Transneft y Gazprom Neft, y a tres sociedades del sector de la defensa; United Aircraft Corporation, Oboronprom y Uralvagonzavod.
De momento el sector del gas ha quedado al margen de las sanciones.
A la lista de empresas que no pueden exportar bienes de doble uso civil y militar se suman además ahora nueve sociedades mixtas del sector de la Defensa.
También se amplían las restricciones de viaje y la congelación de bienes a otros 24 dirigentes y oligarcas rusos, crimeanos y de la zona prorrusa de Donbass.
Con esta nueva ampliación de la lista de personas sancionadas ya son 119 los individuos en los que la UE ha puesto en su punto de mira.
Entre los nuevos incluidos figuran los líderes separatistas prorrusos Alexander Zakharchenko, primer ministro de la autoproclamada República Popular de Donetsk (RPD), y Gennadiy Tsypkalov, primer ministro de la autoproclamada República popular de Lougansk.
También a los llamados ministros de Defensa y de Seguridad del Estado de la RPD, Vladímir Kónonov y Andrey Yurevich Pinchuk, respectivamente.
Los Veintiocho acordaron hace una semana ampliar la restricción de acceso a financiación en los mercados de capitales de los grandes bancos estatales a consorcios rusos de defensa y energía controlados en un 51 % por el Estado o cuyos ingresos proceden al menos en un 50 % de la venta de crudo o productos petroleros.
También pactaron acortar de 90 a 30 días el vencimiento de los instrumentos financieros que podrían comprar y vender para financiarse, y prohibir los préstamos sindicados para los bancos controlados por el Estado ruso, las empresas energéticas y de defensa.
EFE
Comparte esta noticia