Huancayo no tiene dónde derivar sus residuos sólidos

A partir de este domingo Huancayo  no  contará  con una zona para depositar sus residuos sólidos porque los comuneros del anexo de Paccha no permitirán más que lleven los residuos a su zona, asunto que ha venido ocurriendo desde enero de 2008.  Cualquier negociación de ampliación solo será posible si mañana en la reunión convocada por la comunidad participan el presidente regional de Junín, el alcalde de Huancayo y un representante del gobierno central.

Para la participación de este último representante se ha gestionado ayer dicha designación ante la PCM, el MINSA y el MINAM,  mientras que el alcalde Huancayo declinó asistir a la reunión. 

Actualmente la ciudad ha sido declarada en emergencia sanitaria por parte de la DIGESA

El problema de la disposición final de los residuos sólidos de la ciudad de Huancayo se inicia en 2003 con el cierre del relleno sanitario de Paccha por manejo inadecuado. Desde aquella oportunidad a la fecha la ciudad  ha venido realizando la disposición final de sus residuos en botaderos controlados y no en infraestructuras adecuadas a la ley. 

En 2005, gracias a un trabajo multisectorial, se logra concretar la selección de un área para construir una planta de tratamiento y disposición final de residuos sólidos. El lugar seleccionado fue Lastay, localidad que fue desestimada por actos de violencia que ocasionaron un muerto. 

Frente a estos hechos el Gobierno Central a través de la Resolución Suprema Nº 321-2008-PCM del 21 de noviembre de 2008 conforma una comisión de alto nivel para que evalúe  la viabilidad del proyecto de construcción de una planta de tratamiento en un plazo de 30 días. Esta comisión recomendó que la construcción de la planta se paralice de manera indefinida con lo que los residuos de Huancayo se quedaron sin destino. Este problema se replica en los distritos aledaños de Chilca, que produce un promedio de 50 toneladas de residuos diarios, y Tambo, con un promedio de 100.

El domingo difícilmente se conseguirá ampliar la autorización de uso de Paccha por parte de la población para seguir disponiendo los residuos sólidos  ya que no se contará con un representante del gobierno central.