En 2006, inició una guerra entre grupos criminales de la antigua URSS, que al día de hoy continúa de manera silenciosa y cada vez más integradas en la economía mundial.
El encarcelamiento del número uno de la mafia rusa, Zakhar Kalashov, en 2006, abrió una guerra entre los principales grupos criminales de la antigua URSS, que al día de hoy continua, y España se ha convertido en un refugio de estas organizaciones cada vez más silenciosas e integradas en la economía mundial.
EFE
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