Durante la inspección, uno de los presuntos asesinos reconoció haber efectuado un solo disparo al comandante Pedro Guerrero Gilberti.
Por más dos horas agentes de la división de homicidios de la Policía realizaron una inspección ocular al interior del local de la pollería El Corralito ubicado en la cuadra 12 de la avenida Sosa Peláez en el Cercado de Lima, donde el pasado 31 de diciembre fue asesinado a balazos el comandante PNP Pedro Pablo Guerrero Gilberti.
Para tal efecto fueron trasladados hasta ese lugar Hans Mendoza Zevallos y Antony Nalvarte Flores presuntos miembros de la banda los “gatilleros de Loreto” quienes fueron capturados el último viernes en una residencial del distrito de Magdalena del Mar por su implicancia en el crimen
Durante la inspección, uno de los intervenidos reconoció haber efectuado un solo disparo al comandante Guerrero mientras que el otro aceptó haber disparado al techo la noche que asaltaron el referido local, así lo detalló Pedro Santillán, encargado del negocio quien estuvo presente en la diligencia.
Mientras se llevaba a cabo la inspección uno de los jóvenes detenidos realizó un obsceno con el dedo de una de sus manos a los camarógrafos, fotógrafos y periodistas que cubrían la diligencia
En horas de la mañana los detenidos fueron llevados por la Policía a otros inmuebles ubicados en el centro de Lima como parte de las diligencias programadas para determinar el grado de participación que tendrían en el crimen, así como en otros robos en restaurantes y pollerías de la capital.
Tras culminar la inspección policial en “El Corralito” los presuntos delincuentes fueron conducidos de regreso a la Dirincri de la avenida España donde continuaran las investigaciones sobre este caso.
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