La educadora sueca, Cristina Appenzeiller, impulsa el desarrollo en la educación de niños y maestros en Cusco.
Cada año, 750 niños desarrollan sus habilidades y actitudes con la enseñanza de Pukllasunchis, un proyecto que inició hace 30 años Cristina Appenzeiller, ganadora del Premio Integración 2003, para reforzar la práctica de la educación intercultural bilingüe y fortalecer la identidad sociocultural.
Cristina desarrolla diversos talleres para los pequeños de comunidades campesinas. Utiliza un método de enseñanza integral guiado por la filosofía “aprender jugando” a fin de promover valores y derechos humanos en la formación de los pukllas de 4 a 17 años.
“No brindamos una educación limitada al desarrollo mental, buscamos un crecimiento integral con énfasis en las actitudes humanas”, enfatizó Appenzeiller.
La maestra destaca la importancia del quechua como segunda lengua. Por ejemplo, ha notado la gran motivación de los niños cuando se escuchan en los programas radiales que emiten en castellano y quechua.
“Al inicio los padres estaban en desacuerdo con la enseñanza del quechua, ahora el 100% lo aprueba. El cambio se observa en zonas urbanas y rurales”, expresó la educadora.
El sistema de educación de Appenzeiller, también se aplica a los docentes. En los últimos meses, se realizó un taller de capacitación para optimizar la metodología de enseñanza en Cusco, Apurimac y Ayacucho.
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