El imputado reconoció haber disparado contra un grupo de personas pero niega haber tenido intención de matar a alguien.
Un hombre de 53 años disparó contra un grupo de personas y mató a una niña de 11 en la población de Oberaurach (sur de Alemania) porque le molestaban los petardos de Nochevieja, informó este miércoles la policía.
El responsable está detenido bajo sospecha de asesinato, dijo el fiscal de Bamberg Erik Ohlenschlager
El imputado reconoció haber disparado contra un grupo de personas pero niega haber tenido intención de matar a alguien.
Según la declaración del presunto asesino, el ruido de los petardos lo despertaron ante lo que, con una mezcla de irritación por lo ocurrido y de frustración por haberse separado recientemente de su familia, salió con un arma de su propiedad e hizo cuatro disparos en dirección al grupo.
Uno de los disparos alcanzó a la niña que murió poco después.
Ya el primero de enero, la policía se incautó 60 armas de bajo calibre en la población de 450 habitantes, examinó a sus propietarios e interrogó a los vecinos que vivían cerca del lugar de los hechos.
En su primera declaración el ahora imputado dio datos que, tras contrastar con los de otros testigos se revelaron falsos.
"El que su declaración no fuera consistente nos llevó a concentrarnos en él", dijo el fiscal de Bamberg.
Además, una de las balas encontradas era del mismo calibre que el arma de su propiedad.
El imputado, detenido en su lugar de trabajo, está desde hace un tiempo en tratamiento psiquiátrico, era miembro de un club de tiro y había comprado el arma legalmente.
EFE
Comparte esta noticia