El acusado, un fonoaudiólogo, fue detenido el pasado sábado luego que tres menores, alumnos con dificultades de lenguaje, revelaran que el sujeto les había realizado tocamientos.
Un fonoaudiólogo (logopeda) chileno fue procesado y quedó hoy en prisión preventiva por cometer presuntamente abusos sexuales contra tres alumnos de una escuela de Santiago que atiende a niños con dificultades de lenguaje, aunque el número de víctimas podría ascender a dieciséis.
El hombre, de 31 años, fue detenido el pasado sábado por la Brigada de Delitos Sexuales de la Policía de Investigaciones (PDI) después de que dos niñas y un niño desvelaran que el fonoaudiólogo les había realizado tocamientos.
El profesional recibió insultos y escupitajos de los padres al ser trasladado este lunes a prisión desde el 14 Juzgado de Garantía de Santiago, donde fue procesado y se fijó un plazo de noventa días para investigar los presuntos abusos cometidos contra los tres menores.
Sin embargo, desde el sábado hasta hoy, el número de menores que ha asegurado ser víctima del especialista ha ascendido a dieciséis, según han confirmado tanto el ministro de Educación, Joaquín Lavín, como los padres de los afectados.
El logopeda comenzó a trabajar a mediados de marzo en la Escuela de Lenguaje Senderos, en el distrito santiaguino de La Florida.
"Luego de ganarse la confianza de los menores, el sujeto los llevaba hasta su oficina, donde les sacaba la ropa y les efectuaba abusos tocándoles el cuerpo", declaró el sábado el subcomisario de la PDI, Rodrigo Caballero.
El ministro Lavín anunció hoy la creación de un registro de antecedentes penales de profesionales que ejerzan la docencia para que "ninguna persona condenada por abuso sexual, por tráfico de drogas o por violencia intrafamiliar pueda trabajar en un colegio".
Este caso se suma a las investigaciones que afectan a la monja Isabel Lagos, exsuperiora de la congregación Santa Úrsula, a raíz de las denuncias de dos antiguas alumnas por presuntos abusos sexuales cometidos hace más de veinte años.
Además, a fines de marzo, la Fiscalía de la ciudad de Curicó abrió una investigación sobre un presunto caso de abusos sexuales cometidos por un sacerdote católico contra un adolescente de 16 años, alumno de un colegio donde impartía clases de religión.
Pero el caso más emblemático es el del influyente sacerdote Fernando Karadima, formador de cinco obispos, al que el Vaticano halló en febrero culpable del delito de abusos sexuales contra al menos un menor y otros feligreses de una parroquia de Santiago. EFE
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