FIP Brakes International y su gerente general, Chris Katakouzinos, fueron encontrados responsables de la muerte del trabajador por violar normas de seguridad laboral.
Una fábrica de Sidney (Australia) ha sido multada por más de US$ 125.000, luego que un trabajador muriera en una de sus licuadoras gigantes de alta potencia cuando la limpiaba en marzo de 2008.
FIP Brakes International y su gerente general, Chris Katakouzinos, fueron encontrados responsables de la muerte del empleado por violar normas de seguridad laboral, debido a que se encontró un número significativo de fallas en las instalaciones.
El trabajador murió por heridas y laceraciones provocadas por la máquina, que se encontraba encendida cuando el desafortunado realizaba su mantenimiento, informó News de Australia.
“Los riesgos para la seguridad de los empleados eran totalmente previsibles y el incidente no debería haber sucedido”, indicó la aseguradora WorkCover, que denunció a la compañía tras el accidente mortal.
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