Buscar
RPP Noticias
Estás escuchando En vivo
 
00:00 / 00:00
Lima
89.7 FM /730 AM
Arequipa
102.3 FM / 1170 AM
Chiclayo
96.7 FM / 870 AM
Huancayo
97.3 FM / 1140 AM
Trujillo
90.9 FM / 790 AM
Piura
103.3 FM / 920 AM
Cusco
93.3 FM
Cajamarca
100.7 FM / 1130 AM
La informacion mas relevante de la actuaidad al momento
Actualizado hace 0 minutos
Informes RPP
Las denuncias constitucionales que rodean a Martín Vizcarra
EP 1093 • 05:34
Detector de Mentiras
Detector de Mentiras: Difunden imágenes falsas de Donald Trump generadas con Inteligencia Artificial
EP 47 • 01:32
Mamá Limonada
EP02 | T2 | Lonchera contra la anemia
EP 2 • 08:45

Negocio de recoger víctimas desata en Bangkok guerra de ambulancias

Foto: EFE
Foto: EFE

El objetivo consiste en cobrar el dinero que los hospitales privados ofrecen por llenar sus camas con heridos, a pesar de que esa práctica está prohibida.

Cientos de ambulancias de organizaciones consideradas benéficas se disputan sobre el pavimento de las calles de Bangkok el buen negocio de la recogida de víctimas de accidentes y la "propina" de las clínicas por paciente recibido.

Con una falsa etiqueta de que prestan un servicio movidos por la caridad y solidaridad, un nutrido grupo de avispados comerciantes saca del garaje cada noche su flota de ambulancias para arrebatar a los accidentados a las fundaciones Pohtecktung y Ruamkatanyu, las únicas autorizadas para llevar a cabo ese trabajo.

El objetivo de los mercenarios de la ambulancia consiste en cobrar el dinero que los hospitales privados ofrecen por llenar sus camas con heridos, a pesar de que esa práctica está prohibida.

Pohtecktung y Ruamkatanyu, fundadas muchas décadas atrás por ricas familias chinotailandesas, nacieron como funerarias de servicio gratuito al amparo de monasterios budistas, y su trabajo está muy ligado a la superstición y los espíritus.

"No tengo ningún miedo de los fantasmas, siempre llevo conmigo un amuleto budista que me protege", dice a Efe Chavalit Kriengsantikol, conductor de ambulancias de Pohtecktung con casi dos décadas de experiencia en la recogida de víctimas.

Este experimentado voluntario de 39 años, apunta que su amuleto le protege de los espíritus malévolos, pero no de los altercados con miembros de otros equipos de rescate, que según precisa incluso a veces "roban" los cadáveres cuando ya están metidos en la funda.

Al igual que ocurre en otras sociedades asiáticas, la tailandesa crea fundaciones benéficas en respuesta a la escasez de servicios públicos y dado que únicamente la clase acomodada puede permitirse pagar el de una empresa privada.

Hace menos de dos décadas, el escenario de cualquier accidente se convertía a menudo en el de encarnizadas reyertas entre los miembros de las fundaciones Pohtecktung y Ruamkatanyu, debido a que unos y otros reclamaban la víctima por creer que habían llegado primero.

En aquel conflicto en torno a su supuesto derecho a llevarse a la víctima, fue necesaria la intervención de las autoridades para evitar que las trifulcas desembocaran en una guerra al estilo de banda mafiosa.

Las peleas cesaron cuando los responsables de las dos fundaciones acordaron repartirse Bangkok por zonas y establecer horarios de actividad diferentes para sus respectivos equipos de recogida.

"La rivalidad entre las dos fundaciones se debía a una cuestión de reputación y respeto, hoy día los grupos más pequeños sólo buscan un beneficio económico, encima ilegal", explica Mark Cunningham, voluntario de Ruamkatanyu desde hace una década.

"Nos han atacado y hasta disparado, al menos ahora ya no ocurre tanto", asegura este voluntario neozelandés de 39 años.

Cerca del 90 por ciento de las personas que trabajan para Pohtecktung y Ruamkatanyu son voluntarios que por lo general reciben un cursillo en primeros auxilios que dura de dos días a dos semanas.

"Estamos realizando el trabajo que deberían hacer las autoridades, al menos tendrían que contribuir con recursos o dinero para formar mejor a los voluntarios, quienes a pesar de su limitada formación prestan un gran servicio", se lamenta Cunningham.

"La mayoría trabajan en los servicios de rescate para dar energía a su karma o por altruismo, pero muchos también buscan la adrenalina, camaradería y respeto que implica llevar el uniforme", agrega.

Durante las recientes protestas llevadas a cabo en Bangkok por los llamados "camisas rojas" del frente antigubernamental, miembros de los servicios de rescate vivieron situaciones de peligro cuando intentaron recoger muertos o heridos en medio de los enfrentamientos librados entre manifestantes y las fuerzas de seguridad.

Dos voluntarios de unos veinte años de Ruamkatanyu murieron al ser alcanzados por disparos cuando auxiliaban a víctimas, uno de ellos en el interior de un monasterio.

"Rescaté a un manifestante al que un soldado había disparado en la cabeza, pero murió en mi ambulancia", dice de manera confidencial un compañero.

También los voluntarios de las dos fundaciones desempeñaron un papel esencial en los trabajos de búsqueda y recogida de miles de cadáveres que el tsunami dejó sobre la arena de las playas cuando en diciembre de 2004 golpeó varias playas del suroeste de Tailandia.

Pohtecktung ("Ética" en chino), que cumplirá un siglo a finales de año, es más veterana que Ruamkatanyu ("Únete al agradecimiento", en tailandés), fundación creada a finales de los años 50, pero con mayor número voluntarios, unos 6.000 en todo el país.

A diario, los dos monasterios que acogen a sendas fundaciones reciben decenas o centenares de visitantes que hacen donaciones para que los tailandeses sin medios económicos puedan tener un entierro digno, una buena obra para resarcirse del mal "karma", la influencia negativa por las malas acciones en una vida anterior.

Nadie se marcha sin colocar unas varitas de incienso ante las divinidades para aplacar a los espíritus con malas intenciones y consultar su suerte con los palillos y los dados. EFE

Tags

Lo último en Actualidad

Lo más leído

Suscribirte al boletín de tus noticias preferidas

Suscríbete a nuestros boletines y actualiza tus preferencias

Buzon
Al suscribirte, aceptas nuestras políticas de privacidad

Contenido promocionado

Taboola
SIGUIENTE NOTA