Behruz Kamalvandi llegará al país altiplánico para visita oficial de 48 horas y entre sus objetivos están "el intercambio de información sobre situación política, económica y social de ambos países".
El viceministro iraní de relaciones con América Latina, Behruz Kamalvandi, llegará este viernes a Bolivia para una visita oficial de 48 horas, informó hoy en La Paz el Ministerio de Exteriores.
Un comunicado de la Cancillería indica que entre los objetivos de la visita están "el intercambio de información sobre la situación política, económica y social de ambos países, revisión de la agenda bilateral y el análisis de temas concernientes al ámbito internacional", sin más detalles.
Kamalvandi y el canciller boliviano, David Choquehuanca, presidirán el viernes la "II Reunión del Mecanismo de Consultas Políticas Bolivia-Irán".
Luego el visitante se reunirá con autoridades del Ejecutivo y el Legislativo bolivianos y dictará una conferencia en la Universidad Mayor de San Andrés.
El viceministro inspeccionará el sábado una planta procesadora de leche en Achacachi, pueblo del altiplano andino, y el hospital iraní de El Alto, ciudad aledaña a La Paz, y regresará a Teherán el domingo.
Irán colabora con Bolivia en proyectos de desarrollo de diversas áreas, incluidos asuntos militares y de inteligencia, según fuentes diplomáticas.
El presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, visitó en 2007 La Paz, donde se comprometió a desarrollar proyectos de cooperación y ratificó un acuerdo de colaboración industrial de cinco años por 1.100 millones de dólares.
A su vez, el mandatario Boliviano, Evo Morales, viajó a Teherán en octubre pasado para avanzar en acuerdos de minería, agricultura, industria, cemento y alimentación.
El entonces portavoz de Morales, Iván Canelas, negó en diciembre que Irán esté buscando uranio en Bolivia, como señalaron cables diplomáticos filtrados por WikiLeaks.
"No hay absolutamente nada de eso y las reuniones (con Irán) tienen relación con otro tipo de temas de cooperación mutua", dijo Canelas, actual ministro de Comunicación.
EFE
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