El ataque fue realizado por dos hombres a bordo de una motocicleta, un día después del ataque contra varias iglesias que dejó 13 muertos.
Varios policías resultaron heridos este lunes, luego de que un ataque suicida en una comisaría de Surabaya, Indonesia, donde ayer una serie de ataques a iglesias dejó más de una decena de muertos.
De acuerdo con información difundida por TV One, la bomba estaba oculta en una motocicleta en la que iban dos personas y que estacionaron en el control de seguridad de la comisaría. Las imágenes muestran al menos a cuatro policías en el punto de control cuando sucedió la explosión.
El portavoz de la policía de la provincia de Java Oriental, Frans Barung Mengera, informó que cuatro de los cuatro agentes, junto a otras seis personas y los dos atacantes fueron trasladados a un hospital cercano.
Reacción y ataque previo
El presidente de Indonesia, Joko Widodo, calificó el ataque como “inhumano” y “cobarde”. Además, comentó que acelerará la revisión de la ley antiterrorista “tan pronto como sea posible”.
La acción tuvo lugar un día después de una serie de atentados coordinados contra tres iglesias de Surabaya, en los que murieron 17 personas y 45 resultaron heridas, y de la explosión de otra bomba en un apartamento al sur de la ciudad, que causó tres muertos y tres heridos más.
Los atentados contra las iglesias fueron perpetrados por una familia que había regresado de Siria, incluidas dos niñas de 9 y 12 años, y reivindicados por el Estado Islámico (EI). EFE
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