La diputada rusa hizo una advertencia racista en la que pidió a las mujeres de su país no tener sexo con los visitantes extranjeros.
Las rusas son libres para tomar sus propias decisiones, así respondió el Kremlin este jueves a las polémicas declaraciones de una diputada rusa que aconsejaba a las mujeres del país que no tuvieran relaciones sexuales con visitantes extranjeros llegados con motivo del Mundial Rusia 2018.
"En lo que se refiere a las mujeres rusas, ellas decidirán por sí mismas" cómo comportarse con los hinchas que lleguen al país, declaró el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, en una conferencia de prensa, asegurando que son "las mejores mujeres del mundo".
El portavoz del Kremlin rechazó las acusaciones de que Rusia sea un país racista, estimando que "todos los países se acusan mutuamente de racismo y de homofobia".
"Esas acusaciones no tienen nada que ver con el Mundial. Ayer, Putin subrayó que el fútbol está, y seguirá estando, fuera de la política", declaró.
Tamara Pletneva, una diputada comunista de la Duma, la Cámara Baja parlamentaria, declaró que las mujeres de su país no debían tener sexo con los visitantes extranjeros. "Si encima son de una raza diferente, es fatal", afirmó, generando una gran polémica.
AFP
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