Unos 500 trabajadores de La Oroya arribaron a Huancayo para exigir el reinicio de labores en el complejo metalúrgico y la mediación del presidente regional.
Unos 500 trabajadores de la empresa Doe Run que arribaron desde la provincia de Yauli-La Oroya a Huancayo (Junín), protestaron en el frontis del gobierno regional y exigieron el reinicio de labores en el complejo metalúrgico, suspendida desde hace un mes.
El secretario de organización de los obreros, Clodoaldo Pozadas, manifestó que la empresa nuevamente ha retrasado el inicio de las labores hasta el 21 de agosto. Además, detalló que solo les han pagado el 40 % de su gratificación y no les abonan su CTS.
Asimismo, indicaron que la administradora temporal Right Bussiness intenta desautorizar al gobierno regional, quien emitió una resolución que deja sin efecto el cese de labores.
Tras una reunión, el presidente regional de Junín, Américo Mercado, expuso ante los centenares de trabajadores los acuerdos llegados con los directivos del sindicato.
La autoridad regional indicó que refrendarán la resolución que deja sin efecto el cese de labores porque no respetaron el procedimiento administrativo. Además, emitirán resoluciones para salvaguardar la estabilidad laboral de los trabajadores.
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