Suboficial aprovechó su hora de almuerzo para ir a casa de su víctima, lugar donde se produjo una discusión que ocasionó el hecho.
Siete meses de prisión preventiva afrontará el suboficial de la Policía Nacional, Jordán Morales Hernández, por el delito de homicidio simple contra su amigo Bruno Urdániga Chávez, ocurrido el pasado 30 de agosto en Chimbote (región Áncash).
El juez encargado del caso, Román Cruz Avilés llegó a esta determinación, esto luego de demostrarse que Urdániga Chávez fue victimado de un disparo en la cabeza.
La fiscal, Angélica Bayes, planteó lo ocurrido precisando que el suboficial acusado aprovechó su hora de almuerzo para acudir a la casa de la víctima, presuntamente para drogarse. Fue, en estas circunstancias que tuvieron una discusión lo que ocasionó el hecho.
Durante ese momento, el suboficial disparó en la cabeza a la víctima ocasionándole la muerte de manera inmediata. Al ver el hecho arrastró el cuerpo al primer nivel de la vivienda, para luego colocar su arma en la mano izquierda del fallecido.
El suboficial se defendió ante las autoridades señalando que conocía a la víctima desde los 13 años y que habían sido compañeros en el colegio.
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