Aníbal Apari señaló que la verificación domiciliaria ya está lista y que sólo falta que la Sala Penal Nacional resuelva la recusación entre el lunes y el miércoles próximos.
Berenson volvió a prisión el pasado 18 de agosto, después de que la Sala Penal Nacional, que ve los delitos de terrorismo, anulase la libertad condicional otorgada en mayo pasado por la jueza Jessica León, tras haber cumplido tres cuartas partes de su condena a 20 años por sus vínculos con el Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA).
La Sala pidió a la jueza que volviera a resolver el caso incorporando el certificado domiciliario del lugar donde Berenson iba a cumplir el resto de su condena en Perú, trámite que no se había completado anteriormente.
La Procuradoría del Estado presentó luego una recusación contra la jueza León, un pedido que para Apari está retrasando la puesta en libertad de la estadounidense.
El abogado, que también tiene un hijo con Berenson, señaló que la verificación domiciliaria ya está lista y que sólo falta que la Sala resuelva la recusación entre el lunes y el miércoles próximos.
Apari consideró que si la jueza es confirmada en el caso podría emitir una resolución a finales de la semana próxima que podría ordenar la libertad de Berenson.
Además, un juzgado penal de Lima declaró hoy procedente el pedido de libertad condicional presentado por Nancy Gilvonio, quien fue detenida junto a Berenson el 30 de noviembre de 1995 a la salida del Congreso peruano, adonde habían ingresado con credenciales falsas de periodistas.
Gilvonio también obtuvo la libertad condicional tras haber cumplido tres cuartas partes de su condena de 20 años por sus vínculos con el MRTA.
Según Apari la decisión favorable a Gilvonio "demuestra lo absurdo de la resolución de la Sala" que ordenó el reingreso de Berenson a prisión y que, a su juicio, "no tiene sustento".
El MRTA, junto a Sendero Luminoso, tuvo en jaque al país durante los años ochenta y noventa, y mientras que Sendero aún cuenta con algunos grupúsculos activos en valles cocaleros selváticos, el MRTA abandonó por completo la lucha armada. EFE
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