Ministro de Defensa afirma que la Marina no tiene equipos de chuponeo

La Marina de Guerra del Perú remitió a la fiscal de la Nación la documentación encontrada según la cual dos equipos Triggerfish 4080 de interceptación telefónica llegaron al Perú el año 2000, supuestamente a nombre de la Armada Nacional.

Sin embargo, el ministro de Defensa, Ántero Flores-Aráoz, rechazó que estos equipos hayan sido adquiridos por la Marina de Guerra del Perú.

En conferencia de prensa junto al alto mando de la Armada, Flores-Aráoz dio lectura a un comunicado en el cual se informa del hallazgo, en el Departamento de Aduanas de la Dirección de Abastecimiento de la Marina, documentación que acredita que los dos equipos fueron enviados por la empresa "Harris Corporation", mediante guía aérea AWB 01-36720611 de American Airlines, supuestamente a la Marina de Guerra.

El comunicado precisa que los equipos mencionado llegaron al aeropuerto Jorge Chávez el 27 de julio del año 2000 en cuatro bultos, los cuales fueron desaduanados como "material de guerra", según declaración 3065 del 22 de junio del mismo año, amparados por facturas comerciales del 15 de junio del 2000 "sin haberse encontrado prueba alguna que acredite el pago de su precio por la Marina de Guerra".

Asimismo, indicó que el material fue recibido por el técnico primero Pedro Marín Chávez, y como punto de contacto a José Luis Guevara, en ese año oficial de Dotación de la Dirección de Inteligencia de la Marina. Ambos se encuentran en la situación de retiro.

El comunicado subraya que en la base de datos de bienes de la Dirección de Inteligencia de la Marina no figuran tales equipos, los mismos que tampoco han sido ubicados.

"Atendiendo a que la Marina de Guerra del Perú no adquirió los equipos aludidos, tampoco ordenó su adquisición, ni menos aún aparece pagos por los mismos, ha remitido a la Fiscal de la nación, toda la documentación encontrada, y ha solicitado que se amplíen las investigaciones para procesar a los malos elementos, que en supuesta representación de esa institución, adquirieron, internaron y probablemente emplearon en su beneficio o en el de terceros, bienes que no emplea la institución, que no debe ser afectada por acciones reprobables de quienes habrían perpetrados los ilícitos de los que se da cuenta", indicó.