Policía discapacitado expresa indignación por atenciones a Artemio

Perdió su pierna derecha tras una emboscada terrorista en Aucayacu, de la cual él fue el único sobreviente; pero lo que más lamenta es el olvido de la autoridades y el que haya sido separado del Ejército en contra de su voluntad.

Agustín Soto Rivera, un suboficial de la Policía Nacional, recuerda que un 20 de diciembre del 2005, junto a sus 9 compañeros fue cobardemente atacado por subversivos. En aquel entonces todavía "Artemio" mandaba en el Huallaga.

Precisamente, el efectivo en situación de retiro expresó su indignación por todas las atenciones brindadas al capturado cabecilla terrorista, mientras que a él lo atendieron después de 27 horas, cuando ya su pierna era insalvable.

"A Artemio lo tratan de la mejor manera, no han permitido que pierda ni un dedo, ni una mano, pese al daño que nos hizo y lo llevan al Hospital de la Policía. La verdad, los policías y las familias nos sentimos indignados. Errar es humano pero pido que me atiendan lo más rápido posible", expresó en RPP Noticias.

El suboficial Soto Rivera, quien durante años hace viajes de provincia hacia Lima, para demandar lo que le corresponde, dice sentirse "enfermo psicológicamente" por la angustia constante de no saber cuándo el Gobierno dictará una medida que lo favorezca tanto a él como a otros discapacitados de la Policía.

Desde el 2006 que viene luchando porque se le reconozca el seguro de vida y la vivienda prometida por la institución castrense.

Entre tanto, insiste en pedir una audiencia con el presidente de la República, Ollanta Humala, o con el ministro del Interior, Daniel Lozada; porque hasta ahora las autoridades han hecho oídos sordos a sus demandas.