Mariano Rajoy respondió a las iniciativas para establecer un diálogo con Carles Puigdemont, presidente de la región que busca su independencia.
El presidente del Gobierno de España, Mariano Rajoy, rechazó este miércoles la posibilidad de hablar con el presidente de Cataluña, Carles Puigdemont, a quien acusó de chantajear de forma "brutal" al Estado con una declaración unilateral de independencia. El mandatario respondió así, tres días después del referéndum ilegal independentista, a las iniciativas que buscan una mediación para propiciar el diálogo entre ambas partes.
Según confirmaron a la agencia Efe fuentes conocedoras de esos contactos, el Gobierno catalán comenzó a dialogar con el Arzobispado de Barcelona y con el abad de Montserrat para evaluar la posibilidad de que sea mediadores. El líder de Podemos, Pablo Iglesias, también ha intentado que ambas partes determinen a sus interlocutores para abrir una vía de diálogo. Sin embargo, Rajoy, dejó claro al líder izquierdista que no puede hablar con quien ha planteado un "chantaje tan brutal al Estado", en alusión a Puigdemont y a las formaciones secesionistas catalanas.
Diálogo frustrado. Aunque Iglesias dijo que Rajoy no le respondió que no, fuentes del Gobierno español aseguraron que el jefe del Ejecutivo le explicó que lo que tiene que hacer Cataluña es renunciar a la declaración unilateral de independencia, que "no es negociable". Horas después, desde la sede del Gobierno catalán, Puigdemont consideró una "grave irresponsabilidad" que el Gobierno de Rajoy rechace el diálogo y dijo que "este momento pide mediación". También destacó que los ofrecimientos que están llegando "conocen de primera mano" su "disposición".
Inmediatamente después, la vicepresidenta del Gobierno español, Soraya Sáenz de Santamaría, acusó al presidente catalán de vivir "fuera de la ley", y le recordó que en ese ámbito "no hay democracia" ni convivencia. Mientras tanto, el Parlamento de Cataluña se prepara para debatir el próximo lunes, 9 de Octubre, la declaración unilateral de independencia, con la comparecencia Puigdemont como único punto del orden del día, y debatir los efectos del referéndum ilegal celebrado el pasado domingo.
¿Declararán su independencia? Según la ley catalana del referéndum, "dentro de los dos días siguientes a la proclamación de los resultados por parte de la Sindicatura Electoral, (el Parlamento) celebrará una sesión ordinaria para efectuar la declaración formal de la independencia de Cataluña". Sin embargo, tanto esta ley regional como la convocatoria del propio referéndum, firmada por el Gobierno catalán, fueron suspendidos por el Tribunal Constitucional (TC) español.
En la consulta ilegal participaron 2.2 millones de personas, sobre un censo de 5.3 millones (42 %) y el 90 % de los votos fue a favor de la independencia, siempre según datos del Gobierno de Cataluña. La Junta Electoral Central (JEC) de España negó este miércoles cualquier valor a esos resultados, y así se lo comunicó al Gobierno español, al catalán, y a distintas instituciones europeas y a Naciones Unidas. EFE
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