El parlamentario Wilbert Rozas dijo que no se dejarán amedrentar y descartó que la izquierda sea igual al terrorismo.
Los parlamentarios de la bancada del Frente Amplio realizaron un pronunciamiento en el Congreso donde denunciaron una supuesta “campaña de desprestigio y satanización” de parte de la derecha contra la izquierda. En los últimos días, el grupo parlamentario fue criticado por la contratación de la sentenciada por terrorismo Nancy Madrid en el despacho de la parlamentaria María Elena Foronda.
“La derecha de nuestro país, a través de sus ayayeros políticos, han emprendido una campaña de desprestigio y de satanización a la izquierda […] En los momentos más difíciles que atravesaba el país fueron los de izquierda los que confrontaron a Sendero Luminoso”, dijo Justiniano Apaza.
“El país debe saber que estas maniobras de la derecha que abusando de su soberbia y poder político en el Congreso tratan de lavarse la cara apareciendo como los grandes moralizadores”, agregó.
El último domingo, Panorama reveló que Nancy Madrid, sentenciada a 18 años de cárcel por terrorismo, trabajaba desde el 27 de julio de 2016 en la oficina de la congresista por el Frente Amplio, María Elena Foronda. La indignación de la opinión pública llevó a que la parlamentaria la despida y que califique su decisión de contratarla como un “lamentable desacierto”.
Comisión Callao y Ética
El parlamentario Wilbert Rozas dijo que no se dejarán amedrentar y sostuvo que esta supuesta campaña contra la izquierda es consecuencia de la conformación de una comisión investigadora del Callao.
“Nosotros queremos que funcione la comisión del Callao. Eso es lo que les ha tocado en el talón de Aquiles, el que hayamos planteado desde el Frente Amplio que haya una comisión investigadora del Callao en la cual están coludidos los fujimoristas”, indicó Rozas.
El congresista le respondió al presidente del Congreso, Luis Galarreta, quien lo responsabilizó de la reactivación de la comisión de Ética, que no sesiona desde la renuncia de su presidente, el fujimorista Juan Carlos Gonzales.
“Las condiciones para el funcionamiento de la comisión de Ética era que renuncie el presidente y que el nuevo presidente de ninguna manera podía ser de Fuerza Popular […] Le hemos planteado que se debería reestructurar, un representante por bancada, tampoco. Le hemos planteado que se revise el código de Ética, tampoco se quiere revisar”, dijo.
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