Una de las personas que sobrevivió a la intoxicación masiva en Ayacucho, se recupera satisfactoriamente en hospital de Arequipa. Ella perdió a dos hermanas durante el funeral de su padre.
Roxana Cucho llego a su tierra natal, San Jose de Ushua (Ayacucho), el lunes 06 de agosto para participar del entierro de su padre Santos Cucho.
Cuando llego a su casa todo estaba preparado, tres primas de su padre cocinaron el caldo de mote, el estafado de carne y chicha, para invitar a quienes los acompañen durante el entierro.
En San Jose de Ushua se acostumbra realizar un compartir luego de un entierro.
“Ni bien terminamos de servir el estado, Hermelinda y Martha comenzaron a convulsionar. Primero cayeron mis hermanas y los sacamos a todos a la calle, pensamos que era una maldición por la muerte de mi papa”, contó Roxana.
Cuando salieron para buscar ayuda en la posta, la escena era terrorífica, “La mayoría de los que asistieron, estaban en el suelo convulsionando, el técnico no sabía qué hacer, éramos muchos”, cuenta.
En dos camionetas subieron a todas las personas que pudieron hasta el Centro de Salud de Oyon y Marcabamba, lamentablemente algunos murieron en el camino, otros frente a la casa de su padre, también mientras eran atendidos.
En total 9 personas murieron, dos de ellas sus hermanas, su madre sobrevivió.
Roxana Cucho descartó que alguien envenenara la comida, porque su padre era muy querido en el pueblo.
Ella continua internada en el hospital Goyeneche, a donde fue evacuada desde Ayacucho en un helicóptero de la Fuerza Área, ya está fuera de peligro y espera que este viernes sea dada de alta.
Ella vive en Ica junto a su esposo y sus dos hijos, a San José de Ushua pienso volver pero dentro de algún tiempo, por ahora prefiere estar lejos.
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