Enfermedades crónicas o los problemas de salud mental pueden afectar la reputación de los agentes de policía y su situación financiera.
Los policías tienen mayor riesgo de desarrollar una serie de problemas de salud mental y física, como enfermedades cardiacas, problemas de sueño y algunos tipos de cáncer, advierte una investigación de la Universidad de Búfalo en Nueva York.
Además, los índices de suicidio eran más de ocho veces más altos entre los agentes en funciones que en los jubilados o aquellos que abandonaron el cuerpo policial, según informa el HealthDay News.
John Violanti, investigador principal del estudio dijo que el estrés del trabajo diario y el trabajo nocturno, contribuía a un mayor riesgo de síndrome metabólico, un grupo de síntomas que incluye la obesidad abdominal, la presión arterial alta, la resistencia a la insulina, la diabetes tipo 2 y el accidente cerebrovascular.
El experto indicó que las enfermedades crónicas o los problemas de salud mental pueden afectar la reputación de los agentes de policía y su situación financiera.
"Eso es una amenaza real. Si busca (el policía) asesoría de salud mental, no será considerado para ascensos y puede que sea avergonzado por sus compañeros y superiores. En algunos casos, esto puede dar lugar al retiro del arma de fuego, así que los agentes tienen miedo a pedir ayuda", advierte Violanti.
"A los agentes se les debe enseñar a reconocer los signos del estrés y a buscar tratamiento, como parte de su entrenamiento en la academia de policía", agregó.
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