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Taiwán cerró escuelas, suspendió la bolsa de valores y declaró feriado ante el poderoso tifón Gaemi, que tocó tierra en la costa este de la isla en las primeras horas del jueves, tras causar inundaciones en Filipinas.
"Se espera que Gaemi sea el tifón más fuerte en ocho años en tocar tierra en Taiwán, desde el tifón Nepartak de 2016", había advertido horas antes Huang En-hong, un meteorólogo de este organismo.
El presidente taiwanés Lai Ching-te urgió a la población a ser prudente y a evitar los desplazamientos.
El tifón Gaemi también obligó a esta isla de gobierno autónomo a suspender parte de unos ejercicios militares que se celebran cada año para prepararse ante una eventual invasión de China, que reclama su soberanía sobre este territorio.
Las autoridades taiwanesas evacuaron a más de 4.000 personas en tres zonas remotas del norte de la isla, suspendieron los servicios de trenes y de ferri y cancelaron más de 250 vuelos internacionales.