Hay muchas personas que van a los casinos a apostar miles de dólares con el objetivo de ganar grandes premios. Pero en el caso de Eduardo Cardoso, un inmigrante cubano aficionado a esta modalidad de juego, pensó que se encontraba de suerte debido a que ganó tres premios mayores. Sin embargo, su situación migratoria le impidió cobrar el premio de manera inmediata.
Para cobrar el premio, presentó su pasaporte cubano; sin embargo, le indicaron que no tiene validez alguna en Estados Unidos y, debido a ello, tuvo que esperar 18 meses para obtener su recompensa, lo cual le generó una molestia.
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Este fue el obstáculo legal
Cardoso ganó un premio acumulado de U$D 6 400 y, al momento de cobrarlo, le solicitaron un documento que comprobara su residencia legal en un país que no sea Cuba y, a pesar de haberlo abandonado hace 16 años, no tenía manera alguna de comprobarlo.
Ese es el motivo por el que tuvo que pasar 18 meses para que Cardoso pudiera reunir las pruebas necesarias para demostrar que era residente legal en Estados Unidos, hasta que pudo obtener un comprobante de trabajo durante su estancia.
Para ello, en el caso de los inmigrantes cubanos que han jugado en un casino de Estados Unidos, las reglas obligan al Departamento del Tesoro y la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC, por sus siglas en inglés) a ser más estrictos y a demostrar su residencia legal en un país que no sea Cuba.
Ante ello, Mayra Hernández, vocera del casino, indicó que Cardoso sí va a poder cobrar su premio. “Los casinos Seminole siempre pagan todos los premios acumulados, a menos que se lo prohíban las regulaciones del Departamento del Tesoro”, informó.
Eduardo Cardoso indicó que gastará el premio en ir a visitar a su mamá y sus hijos, a quienes no ve desde hace 16 años. “Si no tienen documentos, no jueguen, porque no les van a pagar”, sentenció el cubano.
Crédito video : YouTube | @Telemundo51Miami
