Muchos ganadores de la lotería en Estados Unidos suelen usar sus fortunas en comprar cientos de artículos costosos, en consecuencia, muchos de ellos se quedan sin ninguna ganacia.
Este no fue el caso de Sheelah Ryan, de Nueva York, que ganó U$D 55 millones en la lotería y compartió el premio con su comunidad en Florida. La ganadora creó una fundación destinada a canalizar fondos hacia las madres solteras y sus hijos.
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La labor filantrópica de Ryan también se extendió a la construcción de viviendas de bajo costo para familias de bajos ingresos. Muchas madres solteras que luchaban por poner comida en la mesa y pagar el alquiler encontraron alivio cuando la Fundación Ryan pagó el alquiler atrasado.
La fundación se creó a los meses de que Ryan ganara el premio, fue así como decidió juntarse con su amiga Pamela O'Hab, que se convirtió en miembro de la junta directiva de la fundación, y juntas se hicieron cargo de ayudar a su comunidad.
En 1994, Sheelah falleció tras luchar contra el cáncer. Sin embargo, su deceso no extinguió el trabajo filantrópico que había iniciado, ya que la Fundación Ryan siguió funcionando. O'Hab se comprometió a mantener la organización en funcionamiento para garantizar que el legado de su amiga perdure.
Ryan era conocida por resistirse a la fama y evitar la publicidad. Siempre agradecía a Dios por bendecirla y crear una oportunidad para ayudar a las personas menos afortunadas.
Créditos: YouTube | @InsightsInstantly