El terror de las pantallas se traspasó a la vida real. La actriz Janet Leigh, quien interpretó el papel de Marion Crane en la famosa película 'Psicosis', contó en una entrevista el trauma que le generó rodar las escenas de la cinta en blanco y negro.
No hay duda que 'Psicosis' fue el filme más aclamado de los años 60. Se convirtió en un ícono y referencia mundial sobre el cine de terror. Sin embargo, pocos saben que, hasta los últimos días de su vida, Janet Leigh vivió con el trauma de rodar la famosa “escena de la ducha”.
El trauma de una escena
Fueron tres minutos en pantalla en los que se muestra el asesinato a cuchillazos de Marion Crane, a manos de Norman Bates (Anthony Perkins). Todo ocurrió cuando la mujer se bañaba, tranquilamente, en la ducha de un oscuro hotel.
Las tomas de diferentes ángulos, la buena actuación y la música de fondo coronó a la escena e impregnaron al público y la misma Leigh de miedo. “Dejé de ducharme. Y cuando lo hago, me aseguro de que las puertas y ventanas de la casa estén cerradas. También dejo la puerta del baño y las cortinas abiertas. Siempre estoy mirando hacia la puerta, observando, sin importar dónde esté la ducha”, relató en una entrevista a 'Woman’s World'.
En aquella entrevista, la actriz también narró detalles de dicha filmación, como las precauciones que tuvieron para filmar una escena de desnudez, pues en esa época no estaba permitido. “En aquel momento, todavía existía el código Hays –una serie de reglas que determinaban qué podía verse y qué no en las producciones estadounidenses–. No estaba permitido enseñar nada. Solo el hecho de salir en ropa interior en la primera escena de la película casi los hizo enloquecer, así que en cuanto grabamos la escena de la ducha me cubrí. Por mucho que la gente crea que vio algo, no vio nada, porque no se podía enseñar en ese momento”, contó Janet Leigh.
No volvió a filmar con Hitchcock
Otro dato peculiar que dejó la cinta fue que el director Alfred Hitchcock le dijo a la actriz que no podría volver a filmar otro proyecto con ella, ya que en la mente de los espectadores ella “había muerto en esa escena y resucitarla en otra película habría sido un error”.
Cabe indicar que “matar” a la actriz en los primeros 45 minutos no fue bien visto para la compañía Paramount. Con el temor de que esa idea fuera un fracaso, condicionaron a Hitchcock a desistir de los 250.000 dólares que iba a cobrar a cambio de pagarle el 60 % de lo que recaudara 'Psicosis'. El error fue grande, pues la cinta fue la segunda con mayor recaudación ese año, por lo que las ganancias del director superaron los 15 millones de dólares.