Conducir bajo los efectos del alcohol es una de las infracciones más graves en Estados Unidos, y muchos estados han implementado medidas estrictas para prevenir que reincidan quienes han sido condenados por DUI (Driving Under the Influence). Una de estas medidas es el uso del "ignition interlock device" (IID), un sistema que bloquea el encendido del vehículo si detecta alcohol en el aliento del conductor.
El dispositivo se instala directamente en el tablero del auto y requiere que el conductor sople en él antes de arrancar. Si el nivel de alcohol en sangre (BAC) es superior al límite permitido (usualmente 0.02%), el vehículo no arrancará. Este mecanismo también puede requerir soplidos aleatorios mientras se conduce, para asegurar que el conductor no haya ingerido alcohol después del encendido.
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Conoce cuándo es obligatorio el “ignition interlock” y qué implica
La exigencia de instalar un ignition interlock varía según el estado, pero en general se aplica en los siguientes casos:
- Primera infracción por DUI, en estados con políticas de “tolerancia cero” o cuando el BAC es muy alto.
- Reincidencia o múltiples condenas por DUI.
- Cuando se ha causado un accidente con lesiones o hay menores en el vehículo durante la infracción.
Algunos estados lo requieren desde la primera infracción, mientras que otros lo reservan para casos más graves o reincidentes. En todos los casos, el costo de instalación, mantenimiento mensual y retiro del dispositivo corre por cuenta del conductor, aunque existen programas de ayuda económica para personas de bajos ingresos.
Tener un IID instalado suele ser una condición para recuperar o mantener una licencia restringida mientras dura la sanción. Además, las autoridades reciben informes periódicos con los resultados de las pruebas realizadas por el dispositivo.