La popularidad de la lotería en Estados Unidos es alta y se extiende por todo el país, aunque hay algunos estados limitan su comercialización. Son solo cinco: Alabama, Alaska, Hawái, Nevada y Utah. La pregunta es: ¿por qué?
Si bien este tipo de juegos han cambiado la vida de muchas personas en Estados Unidos, también puede llegar a generar adicciones. Sucede que algunas jurisdicciones han determinado que no es posible vender ni comprar tickets de lotería o raspaditos, básicamente, por ese problema.
En el caso de Alabama y Utah, una de las razones principales de las restricciones son el impacto nefativo que ha tenido en familias de bajos recursos. Si bien estas personas reciben apoyo estatal, algunas veces pueden desviar este ingreso para adquirir boletos.
En Alaska, por ejemplo, sucede algo similar. Las autoridades han decidido prohibir este tipo de negocios debido a los efectos negativos de las loterías en las comunidades rurales.
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Por su parte, en Hawái se ha prohibido la venta de boletos a fin de proteger su turismo local. Según su enfoque, este tipo de comercios dañaría su industria local.
Finalmente, en Nevada se prioriza el mercado de los casinos que hay en Las Vegas. Esta industria es muy fuerte y genera grandes ingresos.
¿Cuál es la estrategia de algunos consumidores?
Se conoce que los días de sorteos, que son lunes, miércoles y sábados, los residentes de estos estados se tienen que movilizar a otras partes para adquirir boletos.