No hay peor miedo para alguien que ver a la persona que amas sufriendo una peligrosa enfermedad. Es por esa razón que un padre de familia decidió hacer hasta lo imposible con tal de salvarle la vida a su pequeño.
Padre decidió ser el donante de su hijo
Diego Celiz es un niño de dos años a quien le diagnosticaron una falla hepática agua en el hospital Guillermo Almenara de Essalud. Ante este tema, los doctores recalcaron que su hígado estaba dejando de funcionar y por ende, requería de un trasplante de urgencia.
“Diego se puso muy delicado, terminó en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) y en esa situación bastante crítica tuvimos que programar un trasplante de urgencia. En esos momentos de extrema urgencia no nos da tiempo de esperar a que aparezca un donante cadavérico. La donación es muy baja en el país y tenemos mucho tiempo de espera”, señaló el jefe del Servicio de Trasplante de Hígado del nosocomio.
Pasaban los días y no conseguían ningún donante, por lo que para no poner en riesgo la vida del menor, los especialistas comprometieron a uno de los padres con el fin de que participen en la intervención.
Luego de realizarse algunas pruebas, descubrieron que Elmer Celiz, el padre del niño tenía mayor compatibilidad, razón por la que decidieron hacer la cirugía.
El niño fue dado de alta
Para alegría de sus progenitores, todo salió bien y el pequeño poco a poco se encuentra recuperándose. El menor pudo salir de UCI y pronto podrá realizar su vida con normalidad. Por su parte, los padres agradecieron al personal de EsSalud por su trabajo y salvar la vida a su pequeño.
Asimismo, Celiz reveló que había rogado a Dios para poder ser el donante de su hijo y afortunadamente, logró serlo.
“Siempre le he rogado a Dios que yo pudiera ser compatible y felizmente todo salió para bien. Estoy agradecido que una parte de mí permita que esté con nosotros ahora”, acotó el padre.
