Kimberly Méndez, una joven latina con necesidades especiales, decidió celebrar sus quince años a lo grande; sin embargo, no todo salió a la perfección. Un grupo de policías llegaron a la propiedad de Kimberly, debido a que habían recibido un llamado por exceso de ruido.
Probablemente, en más de una ocasión, han sido afectados por algún tipo de celebración bulliciosa. Esta vez, algo parecido les sucedió a los vecinos de Greensboro, Carolina del Norte, que, tras el ruido excesivo proveniente de la fiesta de Méndez, decidieron acudir a las autoridades.
De esta manera, los oficiales a cargo se dirigieron al lugar tras el llamado de los residentes para investigar qué era lo que estaba sucediendo. Sin embargo, cuando llegaron, se dieron con la sorpresa de que se trataba de una familia celebrando los quince años de su hija.
¿Cómo fue el recibimiento de la familia a los policías?
Al notar la presencia de los policías, la familia muy amablemente decidió invitarlos a quedarse en la celebración y disfrutar de un buen rato con el resto de los invitados. Además, no se fueron con las manos vacías, ya que disgustaron de un aperitivo.
No obstante, la historia fue compartida en la cuenta de Facebook del propio Departamento de Policía de Greensboro. La publicación ha sido compartida casi 2 mil veces y ya cuenta con 5 mil 'likes'.
“Durante el fin de semana, los oficiales Matthews, King y Johnson recibieron una llamada sobre una queja por ruido y fueron a comprobarlo. Al llegar descubrieron que una joven estaba celebrando su quinceañero y la familia invitó a los oficiales a comer. ¡Las autoridades repartieron calcomanías a los más pequeños y se tomaron una foto con la cumpleañera! ¡Esperamos que esta joven haya tenido un muy feliz cumpleaños!", se puede leer en la descripción de la publicación.