por Armando Gallegos
Redactor
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El robo de cobre es uno de los delitos más comunes en California, afectando diversas ciudades en los condados de Los Ángeles, Riverside y Ventura.
Los ladrones sustraen cobre de placas vehiculares, lápidas, estatuas, postes de iluminación y cables eléctricos, lo que representa un grave riesgo para los residentes, ya que puede provocar fallas eléctricas y afectar servicios esenciales.
Medidas de las autoridades para frenar el robo de cobre en California
Ante el aumento de estos delitos, el fiscal general de California, Rob Bonta, anunció nuevas sanciones para combatir el problema. Según datos oficiales, en el Estado Dorado se reportaron casi 1 800 incidentes relacionados con el robo de cobre, representando un tercio de los casos a nivel nacional.
"California ha visto un aumento en los robos de cables de cobre en todo el estado, lo que ha dejado a los vecindarios a oscuras, ha provocado cortes en telecomunicaciones y servicios públicos, ha afectado operaciones comerciales y agrícolas y ha puesto en riesgo la seguridad pública", declaró Bonta en un comunicado.
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Las personas capturadas por robo de cobre enfrentarán cargos civiles y penales, con sanciones que incluyen:
Multas de hasta U$D 2 500.
Prisión por delitos de robo y vandalismo.
Además, las empresas recicladoras que compren cobre robado también serán sancionadas. Para evitar irregularidades, las compañías deberán cumplir con los siguientes requisitos:
Registrar todas las compras de cobre, incluyendo una identificación válida del vendedor, el número de matrícula del vehículo usado en el transporte y la dirección del vendedor.
Ser sujetas a inspecciones periódicas por parte de las autoridades.
Por último, las autoridades instaron a la población a reportar cualquier información relevante a la policía local.
