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En Florida, el gobernador Ron DeSantis implementó una ley que criminalizaba a los inmigrantes indocumentados que se encontraban en el estado. Esto generó gran polémica dentro de la comunidad inmigrante en Estados Unidos; sin embargo, la medida no podrá llevarse a cabo.
Esta normativa, aprobada en febrero por DeSantis, favorecía al gobierno de Donald Trump para aplicar su política migratoria y ejecutar deportaciones masivas. La ley establecía que ingresar a Florida sin un estatus migratorio legal sería considerado un delito, lo que implicaría encarcelamiento y deportación. Además, en caso de cometer un delito grave siendo inmigrante indocumentado, se podría recibir una sentencia de muerte.
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Este es el motivo por el que Ron DeSantis no podrá aplicar la ley migratoria
Tras la firma de la ley SB4-C, diversas organizaciones a favor de los inmigrantes presentaron una demanda, y la jueza federal del distrito Kathleen Williams ordenó su bloqueo. Ante ello, la administración DeSantis presentó una apelación ante el tribunal federal.
La apelación fue rechazada de manera unánime, por lo que la medida queda suspendida, aunque aún existen instancias de apelación que podrían definir su futuro.
“La SB4-C es un flagrante abuso de poder, diseñado para castigar a los inmigrantes y dividir nuestras comunidades. Pero la Constitución no se deja vencer por el teatro político. Esta decisión nos recuerda que, por muchas veces que intenten retrasar la justicia, los enfrentaremos en los tribunales y en las calles, siempre”, indicó Bacardi Jackson, directora ejecutiva de American Civil Liberties Union (ACLU, por sus siglas en inglés).