En California, miles de estudiantes indocumentados enfrentan barreras para acceder a la educación superior. Aunque muchos de ellos llegaron al país siendo niños, aún se enfrentan a dificultades financieras, falta de información y temor por su estatus migratorio. Para hacer frente a esta situación, surgieron los Dream Resource Centers (DRC): espacios seguros dentro de universidades y colegios comunitarios que apoyan a los “Dreamers”.
Los DRC no solo ayudan a los estudiantes a continuar su educación, sino que también fomentan la equidad e inclusión en el sistema educativo. Estos centros están diseñados para ofrecer orientación especializada, recursos financieros, asesoría migratoria y apoyo emocional. Además, promueven el liderazgo y la participación activa de los jóvenes en sus comunidades.
Te recomendamos
¿Qué servicios ofrecen los Dream Resource Centers?
Cada DRC puede ofrecer distintos tipos de apoyo, pero todos comparten un mismo objetivo: acompañar a los estudiantes indocumentados en su camino académico. Entre los servicios más comunes están la orientación para llenar formularios como el CA Dream Act, asesoría sobre becas privadas, y ayuda con la inscripción universitaria. Muchos centros también tienen personal capacitado para brindar acompañamiento emocional y referir a servicios legales gratuitos o de bajo costo.
Además, los DRC promueven talleres sobre derechos migratorios, programas de mentoría, desarrollo profesional y preparación para transferencias universitarias. Algunos incluso ofrecen espacios de descanso o estudio exclusivos para estudiantes que, por temor o estrés, necesitan un lugar seguro dentro del campus.
En California, hay Dream Resource Centers en muchas instituciones públicas, como los colegios comunitarios, la Universidad Estatal de California (CSU) y varias universidades de la Universidad de California (UC). Estos centros trabajan en conjunto con organizaciones comunitarias y defensores de los derechos de los inmigrantes para garantizar un apoyo integral.
Para acceder a sus servicios, no es necesario tener un número de Seguro Social ni estar protegido por DACA. Los centros están abiertos a todos los estudiantes indocumentados sin importar su estatus actual. Solo necesitas estar matriculado en la institución y acercarte al centro correspondiente.