Numismática en EE.UU.: ¿Qué es la “coin composition” y por qué debes conocerla?

La composición de una moneda va más allá del metal: define su valor, historia y rareza. Aprende qué es el “coin composition” y cómo influye en el coleccionismo.

Numismática USA:  Este término se refiere a los materiales que se usaron para fabricar la moneda, y es un factor clave tanto para determinar su valor como para entender su contexto histórico.
Numismática USA: Este término se refiere a los materiales que se usaron para fabricar la moneda, y es un factor clave tanto para determinar su valor como para entender su contexto histórico.
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En el mundo de la numismática, cada detalle cuenta. Desde el diseño y la fecha hasta los errores de acuñación, todo puede influir en el valor de una moneda. Sin embargo, hay un aspecto técnico que muchos principiantes pasan por alto: el “coin composition” o composición metálica. Este término se refiere a los materiales que se usaron para fabricar la moneda, y es un factor clave tanto para determinar su valor como para entender su contexto histórico.

La composición metálica de una moneda puede ser tan simple como cobre y níquel, o tan compleja como aleaciones con plata u oro. Este aspecto no solo afecta su apariencia y peso, sino también su durabilidad, autenticidad y atractivo para los coleccionistas.

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¿Por qué es relevante conocer la composición de una moneda?

Conocer el “coin composition” permite distinguir entre monedas similares a simple vista pero con valores muy distintos. Por ejemplo, los centavos de Lincoln acuñados antes de 1982 están hechos en su mayoría de cobre, mientras que los posteriores son de zinc recubierto con cobre. Aunque se ven iguales, su valor de reventa puede ser diferente debido al precio del metal base.

Además, ciertas composiciones indican rarezas. Las monedas de plata emitidas en EE.UU. hasta 1964 suelen tener un contenido de plata del 90 %, lo que las hace especialmente codiciadas por coleccionistas y quienes invierten en metales preciosos. Por otro lado, durante épocas de guerra o crisis económicas, se emitieron monedas con composiciones especiales, como los centavos de acero de 1943, hechos así para ahorrar cobre.

También es crucial para detectar falsificaciones. Las monedas falsificadas muchas veces no tienen la misma densidad ni composición que las originales, y eso puede detectarse con instrumentos específicos como básculas de precisión o pruebas magnéticas.

Finalmente, la composición puede influir en cómo debes conservar una moneda. Algunas aleaciones son más susceptibles a la corrosión o a manchas por el contacto con el aire o la humedad.

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